Antecedentes
El BMW Serie 6 se ha renovado por completo para el año modelo 2012. Esta nueva generación que resulta ser la tercera, ha dejado atrás el controvertido estilo Bangle de su predecesor al igual que prácticamente todos los demás modelos de la gama del fabricante. La generación anterior se conocía internamente como E63/E64 para el Coupé y Convertible respectivamente, mientras que en esta nueva nos entrega nombres códigos F12 y F13 para el Convertible y Coupé respectivamente. La única relevancia que tiene este dato es saber que BMW ha decidido en esta ocasión fabricar primero el convertible.
Este nuevo exponente emplea la misma plataforma -o módulos como prefiere llamarlos BMW- que utilizan los Serie 5 y Serie 7, por lo que no sorprende ver mucha similitud en la oferta mecánica entre los tres modelos.
Un punto muy importante a tener en mente es que el Serie 6 Convertible 2012 pese a ofrecer todas las amenidades y tecnologías habidas y por haber, no es un vehículo práctico para el uso diario, tampoco es un deportivo puro y duro. Entonces, ¿por qué razón alguien optaría por conducir un Serie 6 Convertible?
Una verdad absoluta es que el comprador de este auto al ser cuestionado sobre el porqué de su decisión compra bien podría
Características Técnicas y Mecánicas
El Serie 6 de nueva generación se beneficia de prácticamente todo el arsenal tecnológico que dispone BMW, empezando por la oferta mecánica que consiste en uno de los mejores ocho cilindros del mercado, el 4.4 litros Bi-Turbo de 407 hp y 450 lb-pie de torque acoplado a una eficiente transmisión automática de ocho velocidades. Gracias a dicho binomio, el 650iA es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en menos de cinco segundos, nada mal para un auto que pesa 2,068 kilogramos.
Evidentemente cualquier sistema de seguridad existente es equipado por este suntuoso convertible, por lo que ABS, Control de Estabilidad DSC, de Tracción TCS, suspensión adaptativa Dynamic Drive, bolsas de aire, etc, se hacen presentes.
Tal es la cantidad de tecnologías que incorpora el BMW Serie 6 2012 que enumerarlas a detalle resulta casi imposible, pero vale la pena mencionar las más destacadas.
Empezando por el Head Up Display (que no es tan nuevo), que en este caso proyecta a color toda la información imaginable como las indicaciones del navegador, la velocidad permitida y alertas de cambio de carril o el también sorprendente sistema de visión nocturna con detección de peatones con rango de hasta 300 metros.
Las cámaras laterales montadas en las salpicaderas permiten ver en el display lo que sucede en una boca calle y cuando funcionan en conjunto con la cámara trasera se triangulan para desplegar una vista desde arriba que permite estacionarse con mayor facilidad.
Confort
El habitáculo del BMW Serie 6 Convertible es simplemente un lugar impresionante, la calidad de materiales empleados así como el ensamble es simplemente impecable. Una luminosa y atractiva pantalla de 10.2 pulgadas despliega la información del climatizador de dos zonas, sistema de navegación, audio, interfaz de teléfono y cámaras.
Pese a ser un convertible, con la capota cerrada, el 650iA es un auto bastante bien aislado y sin rechinidos ni vibraciones extrañas, aunque claro está que el disfrute que brinda el conducir al aire libre es mucho mayor.
Mención aparte merece el sistema de audio Hi-Fi Professional de doce bocinas y 500 watts de potencia que reproduce de manera excepcional. Por si fuera poco, los insertos en madera, perfiles de aluminio y cueros de excelente calidad hacen de cada trayecto a bordo de este auto un auténtico deleite, claro está que sólo para los pasajeros delanteros porque aunque cuenta con plazas traseras y aun tomando en cuenta las dimensiones del auto, el espacio atrás es apto para un niño pequeño cuando mucho.
Manejo
Quizá el mayor logro de este BMW 650iA es que dependiendo del modo de conducción elegido (cuatro opciones disponibles), el comportamiento puede ser dramáticamente distinto. En modo Confort, la suspensión es suave, las aceleraciones son delicadas y progresivas, mientras que la dirección es suave y fácil de manipular, un verdadero "cruiser" para disfrutar del paisaje y el viento.
Sin embargo, conforme pasamos a modo Normal, Sport y Sport Plus, el desempeño del Serie 6 empieza a cambiar, modificando la rigidez de la suspensión y dirección, respuesta de acelerador, así como el régimen de giro al que se efectúan los cambios mutando a un deportivo de performance más que respetable. Un auténtico Dr. Jekyll y Mr. Hyde.
El binomio que forman el V8 biturbo de 4.4 litros y la transmisión automática de ocho velocidades es simplemente fenomenal, sin duda uno de los mejores “fierros” que se pueden adquirir hoy ya que gracias a la enorme carga tecnológica se puede pasar de un vehículo relativamente eficiente y muy cómodo a uno rápido con capacidad de pegarnos al asiento con firmeza con sólo hundir un poco el pedal del acelerador.
Conclusión
Hablábamos al principio de que el BMW Serie 6 2012 no es precisamente un vehículo práctico, si tomamos en cuenta su tamaño, precio y potencia, y es totalmente cierto. Este BMW no puede acomodar a cuatro adultos cómodamente, ni tampoco llevar el equipaje para toda la familia y aunque equipa un excepcional motor, transmisión y toda la tecnología habida y por haber, no es un deportivo puro como podría ser un Porsche 911.
Aun así, el BMW Serie 6 Convertible 2012 es todo un triunfo de la ingeniería que demuestra cuanta capacidad técnica hay en el fabricante bávaro. La posibilidad de tener un vehículo comodísimo y aislado, un convertible ágil para disfrutar el entorno o incluso un deportivo más que decoroso es algo que hace años hubiera sido posible sólo en un texto de ciencia ficción.
El BMW 650iA Convertible no es un vehículo que participe en un segmento de mercado muy concurrido que digamos. Si analizamos bien la oferta de otros fabricantes, el único que podría lucir como competidor directo es el Jaguar XK R Convertible, que también es de toldo suave y con V8 de inducción forzada, pero siendo honestos y pese al encanto que pudiera tener el exponente británico, el BMW es mejor producto en todos los sentidos. Evidentemente tratándose de una compra meramente lúdica, otros vehículos como el Mercedes–Benz SL o el Porsche 911 también podrían ser competidores, aunque claro está, en ese caso cada uno ofreciendo atributos distintos.