Antecedentes
Pocos vehículos son divertidos de manejar como un MINI y más aún al ser un auto realmente atractivo, ya que levanta miradas en cualquier esquina por donde pase.
En esta ocasión tuvimos a prueba la versión más equipada de la línea Roadster y cuenta con detalles distintivos John Cooper Works tanto en la carrocería, rines como en el interior.
Precio: $34,500 USD
Características técnicas y mecánicas
Este pequeño tiene un motor turbo de inyección directa de 1.6 L con una potencia de 211 Hp a 6,000 rpm y un torque es de 192 Lb-pie disponibles desde 1,850 a 5,600 rpm. Su transmisión es manual de seis marchas acopladas a una tracción delantera.
Referente a desempeño tenemos que el MINI Roadster John Cooper Works acelera de 0 a 100 Km/h en sólo 6.5 segundos, tiene una velocidad máxima de 238 Km/h y su rendimiento de combustible en ciudad es 10.6 Km/l.
En cuanto a dimensiones tiene una longitud de 3,729 mm, el ancho es de 1,683 mm y la altura es de 1,407 mm. El peso total es de 1,140 Kg, la capacidad de la cajuela es de 160 litros y el tanque de combustible es de 50 L.
En el rubro de seguridad cuenta con frenos de disco en las cuatro ruedas con sistema ABS. Asimismo ofrece control automático de tracción y estabilidad. Las bolsas de aire son seis en total y protegen en caso de un choque frontal o lateral. Finalmente las llantas son Runflat, las cuales en caso de una eventualidad y pérdida de presión permiten recorrer hasta 80 Km.
Interior
Como en todos los MINI, el peculiar y atractivo diseño del habitáculo es lo que define a cada unidad de la marca y en este modelo no es la excepción. Al centro de la consola contamos con el estéreo, controles de operación –entre ellos el aire acondicionado- pantalla para monitorear todas las funciones del sistema de info-entretenimiento y el velocímetro de gran tamaño. Del lado del conductor está el tacómetro, un velocímetro digital y odómetro.
En cuanto a equipamiento se refiere tiene asientos con calefacción, seguros, elevadores y retrovisores eléctricos, dirección asistida, volante de posiciones, faros de niebla así como rines de aleación de 17 pulgadas.
Dado que el atractivo de este singular MINI es su estilo roadster, el techo se plega y se extiende fácilmente manualmente, sin necesidad de bajarse de la unidad.
Manejo
Sin duda esta versión del MINI es una de las más divertidas de conducir en cualquier circunstancia de manejo. Ya que es un producto ideal para uso diario como para salir a dar la vuelta con una buena compañía.
En el semáforo, esperando se cambie a verde, al arrancar su impresionante aceleración y sonido te enamorarán a la primera –aunque hay que reconocer que se toma como dos segundos para despegar. Una vez encaminado los cambios entran a placer y responden impetuosamente para moverte en rectas, al igual que en pendientes ascendentes o descendentes.
Su comportamiento en carretera es por demás ágil al igual que atrevido, la seguridad que otorga al volante se agradece en gran parte por su excelente firmeza y el buen trabajo de la dirección –hay que aclarar que mucho del trabajo lo hace el control de tracción así como el de estabilidad.
Algo que hay que destacar en este roadster es que así como es brioso para correr, es igual de eficiente para frenar en tramos cortos o de emergencia; por lo que te sentirás seguro de su pronta y firme respuesta.
Entre las cosas que podríamos tener como “peros” en este singular MINI, sería solamente su elevado consumo de combustible y una suspensión demasiado muy rígida para baches y hoyos. Como último detalle es que el spoiler trasero al levantarse a los 80 Km/h, reduce un poco la visibilidad en el espejo retrovisor para monitorear que las unidades que vienen detrás.
Conclusión
Si buscas un auto para divertirte, moverte a diario, con un desempeño que sorprende y atraer todo tipo de miradas, este vehículo es una buena opción. Sus capacidades de espacio no son su fuerte.
Su atractivo diseño, estilo único y potencia son su principal carta de venta que a muchos enamorará, incluido su servidor.