Esta es una de las buenas noticias para todos aquellos fanáticos de la marca de origen sueco que presenciaron cómo la empresa enfrentó una quiebra y su paulatina desaparición. Pues bien, ha reanudado la actividad en la fábrica Trollhattan (Suecia) con la salida de la línea de producción del pre-serie del nuevo 9-3, con el objetivo de reaparecer en el mercado en 2014.
Esta primera unidad, que ya incorpora el nuevo logotipo de la marca, y las siguientes, servirán para los primeras pruebas del modelo y la calibración de la línea de producción, la que ha estado inactiva durante los últimos tres años.
Este es uno de los muchos pasos importantes en la validación de las instalaciones y procesos de producción como parte de la preparación ante el inicio de la producción, a finales de este año, ha explicado la compañía en un escueto comunicado.
"Todavía debemos finalizar algunas negociaciones con nuestros proveedores, pero podemos afirmar que estamos preparados para la producción", ha dicho Mattias Bergman, presidente de Nevs, la compañía propietaria de la marca.
El nuevo Saab 9-3 es exteriormente prácticamente igual que el anterior, aunque el que saldrá al mercado recibirá algunos retoques. Los mayores cambios son internos y mecánicos, ya que algunos de los proveedores quebraron a la par que Saab en 2011 y se debió sustituirlos, al igual que muchos elementos procedentes de General Motors, antiguo propietario de la marca sueca. Los motores, algunos de ellos también de origen GM, serán reemplazados por nuevos propulsores, aunque el primer nuevo Saab 9-3 de pre-serie aún incorpora el diésel antiguo.
En este momento la fábrica de Trollhattan cuenta con una plantilla de entre 400 y 500 trabajadores, la necesaria para la reanudación de la actividad e irá incrementado a medida que la fábrica adquiera su ritmo de producción adaptado al mercado. La planta sueca ha llegado a tener 3.500 trabajadores, aunque los nuevos propietarios no creen que se llegue al mismo número de trabajadores.
Autos eléctricos
El objetivo de la nueva Saab es iniciar la comercialización del nuevo 9-3 en la primera mitad de 2014, primero en los mercados chino y sueco y paulatinamente al resto de los mercados. Entre los planes de Saab NEVS está el lanzamiento a mediados de 2014 de un vehículo eléctrico basado en el 9-3, ya anunciado por el nuevo propietario y más adelante otro modelo eléctrico de tamaño compacto.
NEVS y los nuevos dueños
La producción de vehículos eléctricos está en la naturaleza de la nueva propiedad de Saab Automobile, National Electric Vehicle Swedenor (NEVS), que desde su constitución se marcó el objetivo de estar a la vanguardia en la industria del automóvil, con especial atención a los vehículos eléctricos, bajo I+D sueco, japonés y chino.
Beijing National Battery Technology es una compañía china hermana de NEVS que opera una planta de fabricación de baterías de vehículos eléctricos en Beijing. Las baterías están basadas en la tecnología japonesa y tienen una alta densidad de energía, en la actualidad de 146 Wh/kg.
NEVS es propiedad al 78 % de National Modern Energy Holdings Ltd. (NME Holdings Ltd.), fundada en 2004 por su propietario principal, Kai Johan Jiang, y registrada en las Islas Vírgenes Británicas, aunque se gestiona desde Hong Kong. NME Holdings es el propietario de State Power Group, una empresa basada en Beijing que ha sido pionera en el desarrollo de energía limpia y renovable en China, a partir de plantas de biocombustibles de alta eficiencia.
El Grupo, que cuenta con 8.200 empleados, opera 31 plantas de biocombustibles y participa activamente como grupo dentro de la tecnología de desarrollo de la energía eólica, el almacenamiento eficiente de la energía, las baterías para los vehículos eléctricos y calderas de biocombustibles.
La ciudad china de Qingdao es dueña del 22 % de NEVS a través de su filial Qingdao Qingbo Investment Co Ltd, que se dedica a las inversiones en empresas ecológicamente responsables. Con una población de nueve millones, la ciudad es un centro económico importante en la provincia de Shandong, en el este de China. El puerto de Qingdao es el séptimo más grande en el mundo.
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