El De Lorean DMC-12 no sería muy recocido si no fuera por su aparición en la trilogía de Volver al Futuro, haciendo viajar en el tiempo a Marty McFly, al Doc y a toda una generación de niños que mirábamos con fascinación al extraño vehículo de acero inoxidable.
Las generaciones pasaron pero la saga se mantuvo en el culto de la ciencia ficción, siendo repetida infinidad de veces en la televisión y captando cada vez una mayor cantidad de público. Fue así como el fracasado De Lorean DMC-12 se convirtió en un ícono, tanto en el cine como en el mundo automotor.
Ahora, el joven polaco Adam Graszk repensó el diseño del clásico de los ochenta y lo hizo viajar en el tiempo hasta nuestros días, diseñando un sucesor digno del De Lorean pero utilizando un típico lenguaje de diseño moderno. Evidencia de esto son ciertos elementos de Lamborghini y de Audi presentes tanto en el frente como en el medallón trasero.
Si bien no hay detalles sobre sus componentes y motorización, sabemos que cuenta con motores eléctricos y suponemos que su carrocería es de acero inoxidable, el elemento distintivo del De Lorean original. A simple vista no es muy parecido, pero navegando en la galería de fotos adjunta seguramente empieces a ver algo del legado de uno de los vehículos más particulares del siglo pasado.