Durante nuestro especial de Lo Mejor de 2013, donde juntamos máquinas impresionantes como deportivos exóticos, sedanes deportivos, muscle cars, etc. logramos coincidir un par de deportivos con motores V10 pero enfoques distintos. Ahora, es el turno de los sedanes más lujosos y exclusivos de nuestro especial formado por la terna: Mercedes-Benz S600L, Audi S8 y el Bentley New Flying Spur cuyas pruebas individuales podrás leer al dar click en los enlaces de cada nombre.
Mientras los alemanes son los topes de gama de cada marca, el Flying Spur es el sedán “de entrada” al mundo Bentley, pero no por eso podríamos calificarlo como austero o simple siquiera ya que todo en éste es un referente al lujo y calidad.
El Audi S8 recurre al motor V8 de 4.0L Biturbo con una potencia de 520 Hp a 5,800 rpm y 479 Lb-pie en un rango de 1,700 a 5,500 rpm aunado a una transmisión automática de ocho velocidades que manda la tracción a todas las ruedas mediante el sistema quattro. Por su parte el S500 L de Mercedes-Benz es el menos “deportivo” de los tres, con un V8 más grande de 4.6L biturbo pero con 455 Hp y 516 Lb-pie de torque entre las 1,800 y 3,500 rpm, conectado a una transmisión automática de siete velocidades 7G-TRONIC PLUS que manda la tracción únicamente al eje posterior. Finalmente está el Bentley, el más poderoso de todos, con un motor W12 de 6.0L biturbo con 616 Hp a 6,000 rpm y 590 Lb-pie de torque a 1,700 rpm y utiliza la misma transmisión de ocho velocidades automática que encontramos en el Audi y que desarrolló ZF, la tracción también llega a las cuatro ruedas.
Las cifras de aceleración de 0 a 100 Km/h quedan de la siguiente manera en orden ascendente: 4.8seg para el Mercedes-Benz, 4.6seg para el Bentley y 4.2seg para el Audi. Esto sí se notaba en la pista y de hecho el S8 era de los más rápidos acelerando de todo el grupo de 16 autos que juntamos. El Bentley podría tener la ventaja gracias al motor mucho más grande pero los 2,475 Kg de peso lo hacen más difícil. El siguiente más pesado es el S500L con 2,015 Kg y finalmente el S8 (gracias al aluminio de la construcción) con 1,975 Kg.
Con todo y todo, estos tres sedanes están muy cercanos en números de desempeño pero ¿Cuál es el mejor?
En materia de acabados, materiales y ensamble, los tres son de lo mejor que hemos podido probar pero el que lleva la ventaja sí es el Flying Spur, con una atención al detalle suprema, piel de la más alta calidad y un ambiente de completo lujo (claro, ¡también es el más caro de los tres!). El que realmente nos sorprendió fue el Clase S ya que el nuevo lenguaje de diseño interior de la marca –que ahora se puede ver en el Clase C, es realmente impresionante, además de que era el más equipado pues contaba con sonido Burmester y sistema de entretenimiento para las plazas traseras. El S8 la verdad es que también tiene un muy buen diseño interior, pero en éste, está más orientado a un tinte deportivo.
El manejo
Primero manejamos el Mercedes S500L que cuenta con el sistema MAGIC BODY CONTROL y qué mejor manera de probar esta novedosa suspensión que en una pista. Lo que hace el sistema es anticipar hacia dónde va a dar vuelta el auto y endurecer la suspensión del lado que recibirá la transferencia de peso para mantener nivelado, esto funciona también para subidas y bajadas. El motor reacciona muy bien, la suspensión es muy cómoda y aunque no es su hábitat ideal, el auto fue muy divertido de conducir en pista. Se siente más liviano que el Flying Spur pero no tanto como el S8.
Después nos pasamos detrás del volante del Bentley. Como decíamos se nota un nivel más arriba en terminados y calidad, pero al igual que el Mercedes, en pista se siente fuera de su zona de confort. Sí, dobla bien en las curvas (sobre todo con la suspensión en el modo más firme), acelera muy bien y se agarra al pavimento como si fuera sobre rieles pero se nota de todas formas bastante movimiento de la carrocería y también las casi 2.5 toneladas de peso. El motor es una delicia y con la transmisión automática de ocho velocidades, aprovecha mucho mejor el enorme torque y potencia del motor de 12 cilindros. Creemos que en una carretera menos “trabada” que la pequeña pista luciría mejor sus atributos.
Finalmente está el S8 que se notaba superior en la pista. Acelera mejor, frena mejor y gracias a la tracción integral logra poner toda la potencia del motor al piso y en el instante en el que queremos. Se notaba mucho más ágil y aunque sí tendía a subvirar ligeramente llegando al límite, en una situación normal nunca te darías cuenta. La combinación entre un motor con buen torque y potencia, la transmisión ágil, peso reducido y tracción integral es lo que le dio la ventaja en la pista.
En conclusión
Tener estos tres increíbles autos a nuestra disposición fue una experiencia inigualable. En total 1,591 caballos de fuerza. Nos gustaría decir que todos son ganadores en algo: el Bentley New Flying Spur en lujo y exclusividad, el Audi S8 en manejo deportivo y el Mercedes-Benz en equipamiento, tecnología y confort pero esa no es nuestra forma de hacer comparativas y tenemos que nombrar a un ganador.
De esta forma, podemos decir que el Mercedes-Benz S500L CGI Biturbo 2014 es el ganador de esta comparativa ya que combina muy bien el lujo, diseño, manejo y confort que podríamos encontrar en los otros dos, pero a un precio más accesible que el Bentley por ejemplo (claro que si el dinero no fuera problema, nos iríamos por el Flying Spur).