Citroën siempre se ha caracterizado por ser una marca innovadora, arriesgada, con diseños que rompían los esquemas y que muchas veces han quedado en la historia. Últimamente, luego de su "separación" de su marca de lujo que justamente se denomina DS, Citroën tiene el campo libre para volver a explotar lo que más sabe: los diseños deslumbrantes.
Parte de este diseño pudimos verlo con el C4 Cactus, y ahora la marca dá un paso más allá con el Aircross Concept. Con ópticas mimetizadas con la parrilla, proporciones robustas y unos rines (como buen concept) descomunales, no hace falta decir que más allá de lo exótico a este diseño le sobra robustez, estilo y presencia.
Obviamente, tiene algunos elementos propios de un SUV aventurero, como los plásticos que cubren los guardabarros y la parte baja del vehículo, como así también su correspondiente portaequipaje. Pero hay otras cosas que si bien pueden ser sólo adornos para un concept, probablemente lleguen al modelo de producción, como la ventanilla trasera enmarcada en metal, o esos "cuadrados orgánicos" que marcan el estilo tanto por fuera como por dentro. Obviamente que las llantas de 22 pulgadas, la ausencia de pilar B y las puertas trasera con apertura tipo suicida no serán de la partida, ya que se tratan de elementos clásicos para resaltar la espectacularidad de cualquier concept.
Si pinesas que por afuera es extraño, el interior te va a dejar boquiabierto. Citroën nos dice que se puso como objetivo primordial el hecho que los pasajeros puedan disfrutar cómodamente del viaje, esto se manifiesta con butacas gigantescas y una pantalla panorámica de 12 pulgadas que puede ser transferida entre los pasajeros mediante un movimiento con las manos captado por un sensor. A su vez, cada una de las butacas está equipada con un micrófono y un parlante para que las conversaciones sean claras y sin esfuerzo (¿o será que el motor hará mucho ruido en ruta?).
El impulsor es el archiconocido 1.6 turbo de 218 hp, que en este caso transfiere su potencia exclusivamente al eje delantero. Momento: ¿todo esto para un vehículo de tracción simple? Claro que no, del eje trasero se encarga un impulsor eléctrico, que lleva la potencia total del vehículo hasta los 313 hp. Esto le permite al Aircross lograr una excelente aceleración de 0 a 62 mph (100 km/h) (4.5 segundos) y a la vez alcanzar un consumo casi absurdo, de 138 mpg (59 km/l).
Quizás no sea el SUV predilecto de muchos, quizás los más conservadores señalen espantados su diseño irreverente, pero justamente de eso se trata Citroën, de romper esquemas. Quien quiera ver, que vea.