BMW Serie 7 2016, mejor imposible

Con una serie de mejoras en diseño, dinámica de conducción y un mayor nivel de tecnología hace su aparición el BMW Serie 7 2016.

Siguiendo la receta del BMW i3 e i8, la sexta generación del buque insignia de la marca alemana utiliza materiales como el aluminio -puertas y tapa del maletero- y polímeros reforzados con fibra de carbono (PRFC) en la estructura de la carrocería para perder cerca de 286 libras (130 kilógramos) con respecto a su antecesor. Por medio de dicha fórmula este sedán señorial no sólo es más ligero, sino que también incrementa la rigidez estructura, mientras que la distribución de peso queda en 50:50.

Antes de tocar el tema del diseño es bueno precisar que este Serie 7 2016 se ofrece una vez más en dos variantes de carrocería, normal y larga. Esta última, que es la que llega a Norteamérica, tiene una distancia entre ejes de 126.4 pulgadas (3,210 mm), esto es 5.3 pulgadas (140 mm) más larga. De esta manera mide 206.2 pulgadas (5,238 mm) de largo, 74.9 pulgadas (1,902mm) de ancho y 58.2 pulgadas (1,479mm) de alto. Nunca antes BMW había producido un vehículo tan grande. Respecto a la versión normal el Serie 7 2016 mide 200.7 pulgadas (5,098mm) de largo, 120.9 pulgadas (3,070mm) de distancia entre ejes, 74.9 pulgadas (1,902mm) de ancho y 57.8 pulgadas (1,467mm) de altura.

A pesar de esta evolución en la talla y diseño, el perfil del BMW Serie 7 2016 es inconfundible. Destaca la evolución de los grupos ópticos delanteros de LED -láser como opción-, la parrilla, las entradas de aire, así como las luces traseras. De serie viene con rines de 19 o 20 pulgadas, dependiendo de la versión y opcionalmente pueden adquirirse ruedas que van de 17 hasta 21 pulgadas.

Como sucede en este tipo de vehículos lo mejor está en el interior. Si nos ponemos a desglosar todo el equipamiento que contiene bien podríamos hacer un libro, así que tocaremos solamente los elementos más importantes. Los materiales empleados son de la más alta calidad, adoptando formas que le confieren un aspecto imponente a todo el habitáculo. Junto a este ambiente lleno de lujo y confort, también se hace presente un cuadro de instrumentos digital, un sistema de información y entretenimiento con pantalla táctil y control por gestos, un cargador de teléfono móvil inalámbrico. Como opción se puede agregar una Tablet de 7 pulgadas tableta extraíble que puede con capacidad para controlar las funciones del auto y un paquete de 'Ambient Air' que al igual que el Mercedes-Benz Clase S libera olores en la cabina.  Otro punto a destacar es el nuevo sistema Remote Control Parking que permite a los propietarios estacionar el vehículo sin que exista una persona tras volante.

Mientras los pasajeros gozan del máximo confort, el conductor puede sentir todo el poder de esta limusina a través de un seis cilindros turbo de 3.0 litros (740i) con 320 hp y 330 libras-pie de torque, o bien un V8 twin-turbo de 4.4 litros (750i xDrive) con 445 hp y 479 libras-pie de torque, ambos con transmisión automática de ocho velocidades y suspensión neumática. También cabe mencionar que para la versión 750i xDrive está disponible un sistema de dirección en las cuatro ruedas.

Para el próximo año hará su aparición versión plug-in que combinará un cuatro cilindros turbo de 2.0 litros con un generador eléctrico.

Será interesante ver la batalla de este BMW Serie 7 2016, que llega a los distribuidores el próximo otoño, con sus acérrimos rivales Audi A8 y Mercedes-Benz Clase S.

• 740i desde $81,300 dólares
• 750i xDrive desde $97,400 dólares