Los tiempos cambian, y con ello los procesos de construcción de autos, incluso Ferrari no está libre de evolucionar en aras de ser más rentable y eficiente.
La marca del Cavallino rampante lleva más de 60 años fabricando deportivos y ultra deportivos, revolucionando así el mundo del automovilismo, tanto en el mundo de las competencias como de los turismos.
Con la llegada a la presidencia de Ferrari de Luca Cordero de Montezemolo hace algunos años, los procesos de manufactura se modernizaron, al grado que entre las esferas de conocedores de Ferrari se mencionan los modelos como: Pre o Post Montezemolo, ya que la calidad mejoró radicalmente y aunque los costos de producción eran elevados, en esa época fueron mucho más controlables y predecibles.
Pasan los años y el mundo da muchas vueltas, Montezemolo fue obligado a adelantar su retiro y la silla que antes había ocupado el “Commentadore” –Enzo Ferrari-, y que exitosamente ocupaba Luca, fue súbitamente ocupada por un ejecutivo irreverente llamado Sergio Marchionne, quien está al mando de FCA (Fiat Chrysler Automóviles)
Desde que Marchionne se sentó en la presidencia de FIAT, muchas cosas han cambiado en el seno de la compañía de Gianni Agnelli llamado también “L´Avvocado”. La primera de ellas es que FIAT se apoderó de uno de los tres grandes de Detroit, Chrysler. Los cambios en todas las empresas en donde Grupo FIAT tenía intereses han sido modificadas por el ejecutivo que jamás usa corbata (Marchionne), y Ferrari pese a su independencia no pudo escapar de la reingeniería severa que fue impuesta desde que el “Marchese” Montezemolo dejo obligadamente su cargo.
Los planes de Ferrari hacia 2017 consisten en que todos sus vehículos compartan una plataforma, como lo hace el Grupo VAG desde hace tiempo y en donde modelos de las marcas Volkswagen, Skoda, Audi, Porsche, Bentley comparten componentes, por descabellado que parezca, Ferrari ha decidido seguir ese modelo de negocio que trasladado a las economías de escala representa muchos ahorros.
El primer modelo que verá la luz bajo este nuevo esquema de producción será el Dino, que sustituirá al California, otros modelos que portarán esa nueva plataforma son los reemplazos -aún sin nombre- del 488 GTB, el FF y el F12berlinetta.
La nueva plataforma será construida en aluminio aeroespacial por razones de costo de producción y facilidad de reparación a diferencia de las “tinas” hechas de Fibra de Carbón que son más ligeras cuyo costo de fabricación es muy alto y no se justifica para coches de “calle” como los Ferrari antes mencionados.
Otra de las acciones que tomará Ferrari es la reducción del tamaño de sus motores en aras de la disminuir las emisiones de CO2 y la “Huella de Carbono” de la marca, por ejemplo se espera que el nuevo Dino porte un V6 Turbo y que algunos modelos que hoy portan un V12 utilicen un V8 también sobrealimentado.
Lo que sí es un hecho, es que los V12 seguirán presentes en vehículos del talante de LaFerrari, y quizá en alguna versión muy especial.