Gracias a la dirección del eje trasero que equipan algunos modelos de Porsche -de serie o como opción- permite un manejo más cómodo y estable.
Básicamente este sistema integra dos actuadores electromecánicos montados en el eje trasero en lugar de la barra de acoplamiento convencional. Esta tecnología permite que las ruedas traseras giren hasta 2.8 grados, ya sea en la misma dirección o al contrario del eje delantero, esto dependiendo de la velocidad.
En caso de no sobrepasar las 31 mph (50 km/h), el sistema dirige las ruedas posteriores en la dirección opuesta a las delanteras. Esto permite acortar virtualmente la distancia entre ejes al reducir el radio de giro. Sin duda esto permite que las maniobras de estacionamiento y en el tránsito urbano sean más cómodas y sencillas.
Al superar las 50 mph (80 km/h), la dirección del eje trasero de Porsche dirige las ruedas traseras en la misma dirección de las frontales. Con este movimiento permite que la distancia entre ejes se vea alargada de manera virtual. Por consiguiente la estabilidad y agilidad es mucho mayor al rodar a altas velocidades en una curva.
Entre 32 y 49 mph (51 y 79 mph) la dirección de la dirección cambia constantemente en función de las condiciones de conducción.
A continuación te presentamos este video que muestra lo antes explicado.
¿Cómo funciona la dirección del eje trasero de Porsche?
