Mazda ha desarrollado el G-Vectoring Control, un sistema que permite que los conductores obtengan un manejo más confortable y estable.
A diferencia de otros sistemas de control vectorial de torque, el sistema de Mazda reduce el par motor de una forma ligera e imperceptible. Asimismo, es capaz de contribuir en el eje delantero, para obtener un "peso extra" en las curvas y así para reducir el subviraje. Esto permite que el vehículo tome las curvas a una velocidad constante y sin la necesidad de realizar correcciones en el volante. Igualmente esta tecnología ayuda a reducir las fuerzas laterales.
De acuerdo con Mazda, el G-Vectoring Control aumenta confort de marcha pero sin repercutir en la rigidez de la suspensión, lo que hace que el vehículo sea más divertido de conducir.
Será a finales de este año cuando la marca japonesa de a conocer el primer modelo que equipará este sistema.
