Lo que inició en una habitual prueba de manejo en un distribuidor Mercedes-Benz de Ballston, Virginia, terminó en grave accidente cuando un cliente potencial chocó un GLE 350.
Esta triste historia ocurrió el viernes 19 de agosto a las 11:30 am cuando una mujer acudió al concesionario de la firma alemana para realizar el test drive del SUV que pretendía adquirir. De acuerdo con los empleados del showroom del Condado de Arlington, escasamente unos segundos después de iniciar la prueba, la conductora impactó el GLE 350 contra cuatro vehículos que se encontraban en el estacionamiento, provocando que el utilitario quedara recargado sobre su costado.
Todo indica que el motivo de este lamentable accidente en el que cuatro personas resultaron heridas, es que la conductora confundió el pedal de freno con el del acelerador.
Una vez queda demostrado que la física no perdona. Si este aparatoso incidente ocurrió a baja velocidad, que nos puede esperar un error al volante cuando velocímetro supera las 35 mph (56 km/h).