Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que anualmente en el mundo mueren alrededor de 1,3 millones de personas por accidentes viales, lo que representa más de 3.500 muertes por día.
Frente a este escenario, la Federación Internacional del Automóvil (FIA) apunta a la escasa formación del personal a cargo de los controles y las carencias existentes en los programas de educación que se imparten en todos los niveles educativos para generar conciencia vial en las generaciones venideras. Por otro lado, la Federación remarca la importancia de impulsar mayor participación, diálogo y coordinación entre todo tipo de organismos dedicados a la seguridad vial. “Es esencial la continua articulación entre instituciones gubernamentales y privadas de forma eficiente, ya que esto facilitará el desarrollo de planes integrales de seguridad vial en nuestro país, acompañados de políticas públicas concretas a largo plazo” comenta el Leandro Perillo, Gerente de Movilidad y Políticas Públicas de la FIA.
Otro de los aspectos a trabajar es la necesidad de actualizar las normativas vigentes en relación a la velocidad, el uso del casco, la ingesta de alcohol, la utilización del cinturón, y la forma en la que viajan los ocupantes en el vehículo. En cuanto a la seguridad vial infantil, en nuestro país, el 80% de los menores son transportados de forma insegura en los vehículos, debido a que no cuentan con sillas de seguridad homologadas. También es importante contar con un sistema confiable de datos e indicadores que contribuyan a la toma de decisiones.
Sobre los usuarios vulnerables, uno de los estudios de FIA, reveló que más del 30% de los peatones presenta conductas riesgosas como circular distraído al utilizar dispositivos electrónicos y no respetar las normas de tránsito; y en cuanto a los ciclistas, 8 de cada 10 no cumplen con la reglamentación necesaria para circular de forma segura en la vía pública.