Vayamos al grano.Los cambios que tiene esta 1000R SS se concentran en el sistema de cambios al volante y el programa de launch control en partidas. Se mantiene la alta confiabilidad mecánica de su tren motor, así como su destacada autonomía de 150 millas (240 kms), la mayor de la categoría. Así mismo, en Yamaha han optado por mantenerse con transmisiones tradicionales y no hacer el paso a una CVT, lo que también mejora la definición en la entrega del performance y la resistencia completa del paquete impulsor, sin contar que la hace más fácil de mantener y de reparar.
En detalle, la Yamaha es impulsada por un tricilindrico de 1 litro, con 12 válvulas, doble árbol de levas y lubricación por cárter seco, el que entrega 113 hp y 76 libras-pie de torque, acoplado a una nueva transmisión manual, de embrague pilotado (multidisco lubricado) y con cambios secuenciales con levas al volante. Cuenta también con tracción a las cuatro ruedas, incluyendo bloqueo del diferencial central y dirección de asistencia eléctrica. La caja de cambios cuenta con un programa llamado YCC-S que es básicamente una especie de "Rev-Match" que acelera el motor o piñizca el embrague según se necesite, cosa que los cambios siempre entren rápidamente y sincronizados. También está el programa de Launch Control, que permite largadas limpias, utilizando el máximo agarre y performance del motor.
Dos novedades extra que se agregan a la SS son cubiertas para la cabina con mayor aislación térmica y el debut de nuevos amortiguadores Fox Podium X2, con los que logra un despeje de 330 mm al suelo, un recorrido de 410 mm en el tren delantero y 432 mm en el trasero.
Pero bueno, como no todo son especificaciones, nos pusimos al mando de la Yamaha y pudimos comprobar varias cosas, con respecto a otros modelos de competencia o de alta gama dentro de las UTV. El primero es su entrega de potencia, mucho menos explosiva que en los modelos de Can-am, pero por otro lado con alta elasticidad para moverse con comodidad, sin importar lo complicado del camino. Lo segundo tiene que ver con lo bien lograda de la caja de cambios, donde prácticamente se corta la brecha entre una caja manual y una automática, gracias al hecho de ser secuencial. También sorprende el hecho de que ya por sus prestaciones se encuentra completamente en regla para competir cualquier campeonato homologado. Solo mínimas modificaciones de seguridad, un casco y a correr.
Precio
desde $22,399 dólares
Yamaha YXZ 1000R SS