En 1992, la filosofía de Honda revolucionó el mundo del motociclismo deportivo luego de situar su objetivo en la relación peso/potencia, siendo la CBR900RR Fireblade, la primera que logró ese equilibrio perfecto. Luego de 25 años Fireblade sigue evolucionando, basándose siempre en el concepto de Control Total. Y hoy, en sus bodas de plata, llega a Chile una nueva generación, más ligera que su versión anterior, con mayor potencia y equipada con los más avanzados dispositivos electrónicos que dan soporte al concepto de desarrollo del proyecto: CBR1000RR Fireblade.
Claro que antes de hablar de la Fireblade, es bueno recordar que es un modelo que deriva de la familia CBR, nacida en 1983 con la primera naked CBR400, una moto compacta pero deportiva. Asi fue como la gama fue creciendo, con modelos más accesibles y mas nuevos, asi como las variantes de alto performance, nacidas con la ya mencionada CBR900RR Fireblade. El exito de la CBR900RR, generó un nuevo segmento, el de las motos superdeportivas y también significo un duro golpe para una de las motos deportivas de Japón más emblematicas, la Yamaha FZR1000, la cual nunca encontro una digna sucesión hasta casi 10 años despues con la R1. Todo, culpa de la Fireblade.
Su par y potencia a bajo régimen mejoraron hasta alcanzar los 189 HP, con la posibilidad de elegir entre 3 modos de entrega de potencia. Este aumento de potencia se logra en parte, gracias a la utilización de magnesio y a un meticuloso estudio y aligeramiento de las piezas individuales, que logran una reducción de 15 kilos respecto a su predecesor, logrando un peso total de 195 kg, lo que se traduce en una relación peso/potencia mejorada en un 14%, alcanzando el mejor nivel en la historia de la Fireblade. Además, está equipada con suspensión Öhlins semi-activa con Control Electrónico, Honda Selectable Torque Control, freno de motor seleccionable, nuevo programa de ABS, entre otros, que refuerzan una experiencia única de conducción
Funciona tan bien en la carretera como en el circuito, y para Honda marca el comienzo de una nueva era. Su equilibrio logra un motor que sube más rápido y más alto de revoluciones, con una relación de compresión mucho más elevada y un diagrama de distribución revisado.
En términos de seguridad y equipamiento, agrega tres modos estándar de pantalla: Street, Circuit y Mechanic, que proporcionan toda la información necesaria para el conductor respecto al tipo de pilotaje. La información mostrada puede ajustarse y personalizarse durante la marcha por medio del interruptor de la piña izquierda y la pantalla TFT de cristal líquido.