Ante el éxito en ventas del GLA, Mercedes-Benz se ha visto en la necesidad en ampliar la producción de este modelo para satisfacer la demanda de los diversos mercados, principalmente China, Estados Unidos, Alemania y Gran Bretaña.
Con este aumento en la producción, ahora, además de ser ensamblado en las fábricas de Rastatt, Alemania, y en Beijing, China, el Mercedes-Benz también está saliendo de las líneas de ensamble de la planta de Sindelfingen, ubicada a 12 millas (20 kilómetros) de la sede central de la compañía en Stuttgart.
Si bien, este centro de producción es la planta líder para la producción del Clase S y Clase E, CLS, así como del Mercedes-Maybach y el Mercedes-AMG GT, gracias a su flexibilidad tiene la capacidad de ensamblar, por primera vez, un vehículo compacto con tracción delantera. A su vez, la llegada del GLA a la fábrica marca el punto de partida para el proyecto piloto 'Innovation Factory', que marca el futuro de la producción en Mercedes-Benz Cars.
Por medio de esta táctica, dicha planta además de fabricar vehículos grandes con un lujo superior y el GLA, en un futuro también será la encargada de producir los vehículos eléctricos de la nueva marca EQ.