En una especie de homenaje al auto de carreras W 12 de 1937 -capaz de alcanzar un récord de 268.9 mph (432.7 km/h)-, Mercedes-Benz presenta el monoplaza Vision EQ Silver Arrow, un vehículo eléctrico con un diseño, desempeño y tecnología sorprendente.
Bajo la filosofía de diseño Sensual Purity, la espectacular carrocería de 208.6 pulgadas (5.3 metros) de longitud fabricada de fibra de carbono destaca por la gran aerodinámica lograda por los trazos fluidos y los elementos impuestos para contrarrestar la resistencia al viento. Igualmente, es de llamar la atención el tono plata de la pintura y los enormes rines de aluminio de 26 pulgadas con 168 radios por ruedan impuestos en unos neumáticos de medida 255/25 R24 en la parte delantera y 305/25 R26 en la parte trasera.
Siguiendo los pasos del exterior, la cabina monoplaza de este impresionante auto eléctrico delata una visión futurista tanto por la arquitectura como la tecnología que adopta. Como buen Mercedes-Benz, la vanguardista cabina obtiene materiales tradicionales de alta calidad como la tapicería de cuero en el asiento y volante, el aluminio cepillado y los insertos de madera.
Por otro lado, las soluciones modernas de alta tecnología, como la gran superficie de proyección para la pantalla panorámica 3D y las soluciones innovadoras para la experiencia del usuario, como la opción de carrera virtual, representan el carácter visionario de la marca.
Concebido como un automóvil 100 por ciento eléctrico, el Vision EQ Silver Arrow no sólo destaca por la potencia de 738 hp, sino también por batería recargable de 80 kWh que le permite alcanzar una velocidad máxima superior a 250 mph (400 km/h).