Como parte de su plan de electrificar su gama de modelos a partir de 2021, Infiniti presenta el Project Black S Prototype, un concepto que demuestra cómo se puede implementar la tecnología híbrida de los monoplazas de la Fórmula Uno en un automóvil convencional.
Para su accionamiento, este prototipo basado en el Q60 Red Sport 400, combina la potencia del conocido motor VR30 V6 twin-turbo de 3.0 litros con el sistema de recuperación de energía (ERS) para generar una mayor potencia y torque. En la acción, el sistema híbrido que desembolsa 563 hp puede ir de 0 a 62 mph (100 km/h) en exactos 4.0 segundos.
Técnicamente, este auto desarrollado entre los ingenieros de Infiniti y Renault Sport Formula One Team utiliza tres unidades generadoras de motor (MGU). Una sola unidad MGU-K ('K' de kinetic -cinética-) recolecta la energía del frenado. Por su parte, los turbocompresores gemelos eléctricos del seis cilindros están equipados con dos unidades MGU-H ('H' de Heat –calor-), para recoger la energía térmica de los gases de escape. En conjunto, esto permite que el tren motriz genere energía eléctrica tanto en el frenado como en la aceleración.
Encima de esta tecnología híbrida, el Project Black S Prototype ve mejorada la eficiencia aerodinámica en comparación con Q60 Red Sport 400, lo anterior es logrado por un kit de fibra de carbono desarrollado para elevar el downforce.
Sin duda, este concepto también deja en claro que los futuros modelos de Infiniti dejarán en el olvido el aspecto sobrio por uno más atrevido.