Una las personas más importantes en la historia del automóvil es el ingeniero francés de origen belga Jean Joseph Etienne Lenoir, quien creó el primer motor de combustión interna de dos tiempos en 1860 y el de cuatro tiempos en 1863.
Como parte de sus inventos desarrolló la bujía, esto con el objetivo de lograr la chispa utilizada para quemar la mezcla de aire y gasolina dentro del cilindro.
Desde su creación hace más de 160 años, este elemento vital en los motores de combustión no ha sufrido una evolución tan notoria como si ha ocurrido con otros elementos del automóvil.
Sin embargo, parece ser que ha llegado el tiempo en el que las bujías sean reemplazadas con algo de alta tecnología para mejorar en gran medida la eficiencia del motor.
Transient Plasma Systems, desarrollador de sistemas de energía pulsada, se está encargando de que los motores de combustión desechen a este componente, con un sistema de encendido de plasma pulsado, o pulsos por nanosegundo de plasma muy caliente (de ahora en adelante llamado encendido por plasma transitorio).
Esta innovación tiene varias ventajas sobre el encendido por chispa tradicional, demostrando consistentemente reducciones en el retraso del encendido, la capacidad de mezcla pobre y la capacidad de encender índices de flujo de masa más altos, lo que da como resultado una eficiencia mejorada y emisiones reducidas.
FEV, un proveedor de servicios en el desarrollo y prueba de vehículos y sistemas de propulsión, evaluó el rendimiento del sistema de encendido de energía pulsada en nanosegundos en el motor de gasolina de cuatro cilindros de 2.5 litros de Toyota, y se encontró que logra una eficiencia térmica del 40 por ciento.
Los resultados indican un beneficio de consumo de combustible específico del freno -medida de la eficiencia del combustible de cualquier motor primario que queme combustible- de hasta un 6 por ciento con cambios menores de calibración, que incluyen una estrategia de encendido de pulsos múltiples, mayor recirculación de gases de escape y sincronización de encendido optimizada.
Finalmente, este sistema de encendido mostró una tolerancia mejorada a la mezcla pobre en comparación con el sistema de encendido original, lo que permite el potencial de futuras estrategias de combustión similares a la estrategia de mezcla pobre en el Mazda Skyactiv-X.
Las estrategias de combustión habilitadas por el sistema de encendido TPS podrían resultar en ganancias de economía de combustible superiores al 20 por ciento.
A diferencia de los sistemas de la competencia que implican costosos rediseños del motor y el desplazamiento de la arquitectura del motor actual, el sistema de encendido por plasma transitorio funciona junto con los diseños de motores existentes.