Si bien la marca alemana está más dedicada a los sedanes de lujo y deportivos, los vehículos comerciales también forman parte importante de su repertorio comercial en muchos mercados del mundo. De hecho, hay modelos como el Mercedes Benz Clase V al que le ha ido tan bien, que actualmente viven su primera década.
Y en ese marco, la firma ha decido incorporarlo a su presente y futuro inmediatos, o sea, la electrificación. Al respecto, la Clase V ha servido de mula para que Mercedes trabaje en el desarrollo de la nueva arquitectura escalable denominada VAN.EA, la cual, entre sus principales características, destaca su “composición” tri-modular.
Fotos vía CarsCoops
¿Y, eso que significa? Que el “cuerpo” de la van está divido en tres sectores: en el frontal se colocará el motor eléctrico y la tracción delantera. El segundo -o central- determinará el largo de la unidad y la capacidad de las baterías que podrían alcanzar hasta 500 kilómetros de autonomía; mientras que el tercero o trasero podrá disponer o no, de otro motor eléctrico.
De esta manera, Mercedes Benz dispondrá de mayor flexibilidad al momento de surtir pedidos tanto para configuraciones ICE como EV. Además, la nueva arquitectura deja listo cualquier variante de la van para trabajar con autonomías de hasta nivel 4, dependiendo el tipo y modelo.
Finalmente, la marca de la estrella asegura que con la arquitectura VAN.EA se ofrecerá una completa gama de modelos compuesta de furgonetas, ambulancias y plataformas, mientras que las variantes para pasajeros, serán las más lujosas y equipadas pensando en el mercado de los monovolúmenes de lujo en el que Norteamérica también tiene demanda importante; es por ello que la nueva Mercedes Benz Classe V llegaría a EE.UU antes de 2030.
