La ley de la conservación de la energía establece que la energía no puede crearse ni destruirse, sólo convertirse de una forma de energía a otra y la ciudad de Barcelona lo está usando a su favor.
El Área Metropolitana de Barcelona (AMB), los Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) y el Ayuntamiento de L’Hospitalet de Llobregat se unieron para instalar la primera electrolinera que aprovecha la frenada del metro para alimentar los puntos de recarga para autos eléctricos.
Este proyecto está adherido al programa europeo MetroCHARGE y consiste en la instalación de "metrolineras", que son estaciones de recarga cerca de paradas de metro para que la obtención de energía provenga de la frenada del convoy.
Los nuevos trenes de la red de metro de Barcelona cuentan con un sistema de frenado eléctrico y una serie de recuperadores para aprovechar y trasladar esta energía generada a zonas colindantes por lo que este sistema es equivalente a la frenada regenerativa de los autos eléctricos e híbridos, pero a gran escala.
Xavier Flores, delegado de TMB señala que "El metro recupera cerca de 14 GWh al año, el equivalente al 5,5% del consumo energético de toda la red".
Cada metrolinera cuenta con dos cargadores de 50 kW, dos plazas de estacionamiento y tres conectores que se pueden utilizar simultáneamente. Adicionalmente, estas estaciones contarán con paneles solares como apoyo.
El objetivo de Barcelona es extender este sistema por sus distintos puntos de carga así que los diferentes puntos de MetroCHARGE se integrarán en la red metropolitana de electrolineras.
Si te encuentras en Barcelona y quisieras utilizarla, sólo debes registrarte en la app AMB Electrolineres para poder recargar y dependiendo del conector utilizado, el tiempo máximo de uso será de 30 minutos, una hora o dos horas.
