Si bien la firma de Elon Musk sigue teniendo seguidores en muchas partes del mundo, también existen detractores y hasta arrepentidos compradores; no es para menos con tantos temas de calidad que, como bien sabemos, han resultado en demandas y problemas legales para la marca americana.
Ahora, a lo anterior se suma el “desdén” que el Departamento de Policía de Los Ángeles ha hecho a la intención que tiene la corporación por sumar vehículos Tesla como unidades policiacas, luego de que varios jefes de distintos sectores de la ciudad manifestarán algunas debilidades que el Tesla Model 3 -modelo que se pretende introducir- presenta como auto policiaco.
A la par de esta situación, hay que recordar que la corporación angelina se encuentra en plena transición de unidades, siendo los icónicos Ford F-150 Lighning, o el Dodge Charger, los modelos más usados y preferidos por los policías, sin embargo, esos tiempos están cambiando y la electrificación innecesaria, pero sobre todo funcional para la policía, está llegando.
Sin embargo, los policías han levantado la voz señalando cada aspecto por el cual un Tesla Model 3 -y cualquiera- no debería ser auto policiaco:
- Espacio limitado
- Tecnología no compatible con tareas policiacas
- Falta de infraestructura para recargas
- No hay espacio suficiente para prisioneros
- Los asientos no soportan el choque de los cinturones y chalecos antibalas
- Son despeje al suelo es demasiado bajo para un auto policiaco
Con todas estas demandas, es probable que, solo por el momento, el Departamento de Policía de Los Ángeles sea escuchado en cuanto al tipo de vehículo que la corporación deba darles, sin embargo, y tratándose de una ciudad con tantos problemas de contaminación, así como normativas ambientales, es solo cuestión de tiempo para que los autos policiacos eléctricos sean una realidad, quizás no con Tesla pero sí con un Dodge Charger Daytona o un Ford Mustang Mach-E, por ejemplo.