Mazda regresa al mundo del alto desempeño con su nueva división, Mazda Spirit Racing. Ayer te contábamos de su primer modelo de producción y una edición especial súper limitada. Hoy, la marca nos muestra otro nivel con un concepto basado en su SUV CX-60, en lugar del Mazda3.
La CX-60 es una versión más compacta de la CX-70, diseñada para mercados como Europa y Japón, mientras que la CX-70 apunta a Norteamérica. Esta CX-60 modificada incluye un gran alerón trasero, toma de aire en el techo, logos MSR, escape cuádruple, frenos de pinzas rojas, rines negros de 20” y un acabado mate con detalles en amarillo.
En el interior, destacan los asientos tipo cubo Recaro con armazón de fibra de carbono y arneses de seis puntos, como un auténtico auto de carreras. Aunque no hubo cambios mecánicos significativos, integra frenos más grandes con pinzas delanteras de seis pistones. Mantiene su motor turbodiésel de 6 cilindros, 3.3 litros, con 254 hp y 406 lb-pie de torque, tracción AWD y transmisión automática.
Este modelo concepto no solo muestra la capacidad creativa de Mazda, sino que también da pistas sobre cómo la marca podría explorar nuevas formas de combinar diseño y desempeño en sus vehículos. Además, demuestra cómo las SUVs pueden evolucionar para atraer a un público joven y entusiasta de los autos deportivos.
Aunque no se espera que este concepto entre a producción, su diseño audaz y las características únicas podrían inspirar futuras ediciones especiales de la línea CX. Es posible que veamos elementos como los acabados mate, rines deportivos y asientos de alto desempeño en modelos destinados al mercado norteamericano.
